Se llama The Showroom Vintage , abrió allá en 2007 en Earlham Street, zona de Covent Garden en Londres y pronto se estableció como uno de los lugares de culto en el panorama de las tiendas de artículos clásicos de todo el mundo.
La razón es muy simple: detrás de los mostradores de madera vieja impregnada de olor del pasado, dos chicos jóvenes - Douglas Gunn y Luckett Roy - animado por una pasión sin límites de caza tesoros de la ropa, viaja a lo largo y ancho del mundo por muchos meses del año, hurgando graneros, almacenes y cobertizos en busca de la pieza única y así unirla a su sala de exposición.
Muchas piezas, los dos se las arreglan para encontrarlas hábilmente, son en realidad piezas únicas halladas en tiendas casi descatalogadas en el mercado que tal vez no conservan un ejemplo en sus registros de ropa que los mismos propietarios han adaptado a las necesidades o circunstancias dado a la falta de fabricacion de esos mismos productos .
Es por eso que hay muchos diseñadores en este nicho de Londres la meca para los amantes de este genero,están incluso sólo para poder seducirse de ese estilo y olor que impregna la moda vintage, para darle ideas e inspiración para su próxima colección, o sencillamente para entender la obra del pasado: una forma de un collar o la posición de una hebilla, por ejemplo.
Al igual que cualquier tienda que se precie de época que también tiene su propia alma, o más bien su inclinación, el de la sala de exposiciones del vintage reina la ropa con muchas técnicas funcionales, por lo que en el espacio de ropa deportiva prevalecen.
Ropa de trabajo,la ropa militar, fogonero años cuarenta o cincuenta, pantalones de bombero chaqueta, chaleco, pantalones vaqueros a través de los años treinta.
Hoy, parte de la increíble colección de Gunn y Luckett - cuyos líderes se puede comprar, para gran disgusto de los dos, o simplemente alquilar normal, termina en un único sitio, en la inspiración de los grandes visionarios.
El Caballero Vintage, Biblia para los amantes del vintage,tienda de culto para todos los románticos de la ropa, todo un privilegio.
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