Una apuesta clara y personificada, de observar la moda de un punto de vista unico.

miércoles, 17 de abril de 2013




 El abecedario sigue avanzando y hoy llegamos a la letra H. ¿Y lo bien que vais a quedar cuando le digáis a vuestra pareja que le vais a regalar un vestido de Haute Couture o que os vais a convertir en hipster? Seguro que os come a besos. ¡Allá vamos!
Haute Couture.

Este término es lo que se conoce en España como Alta Costura. Consiste en la creación de prendas a medida para cada cliente para las que se utilizan tejidos de primerísima calidad y en las que se cuidan los detalles y acabados al mínimo. Evidentemente, este tipo de prendas suele tener un precio bastante elevado no apto para cualquier bolsillo.
Si bien en un primer momento, con Haute Couture se hacía referencia a la labor que en el siglo XIX realizaba en París el diseñador Charles Frederick Worth, actualmente se trata de un término regulado por la ‘Chambre Syndicale de la Haute Couture‘ (Cámara Sindical de la Alta Costura). Ésta determina los requisitos que debe seguir una firma de moda para que se le pueda considerar Alta Costura. Entre ellos destaca el diseño de ropa a medida y bajo pedido de clientes privados o la posibilidad de vender solo un diseño de cada prenda de la colección por continente. Eso sí, fuera de Francia, este término se usa de manera más informal sin necesidad de tanto requisito.

Hebilla.




Las hebillas son un tipo de cierre que sirve para abrochar dos partes de determinados tipos de prendas. Cuentan con un clavillo que sujeta la tira que pasa a través de ellan. Suelen ser metálica, aunque actualmente las podemos encontrar de otros materiales, como por ejemplo plástico. Son habituales de cinturones, zapatos y bolsos.


Hipster.




Hipster es un tipo de subcultura urbana actual bastante compleja de definir, ya que aunque sus miembros, que suelen ser veinteañeros y treintañeros, presentan hábitos o estilos comunes, lo que de verdad les define es su rechazo por lo predominante y su acercamiento al pensamiento independiente, la contracultura o la música indie, entre otras cosas.
¿Y esto cómo se traduce en la moda? En teoría, en la apuesta también de tendencias independientes alejadas de lo predominante. Pero amigos, ser hipster también se ha convertido en una moda y, evidentemente, las firmas de ropa han visto un filón en ello. Al final, paradójicamente, lo alternativo está muy presente en los canales de moda habituales.
Algunas prendas a tener en cuenta para ser un auténtico hipster, al menos en apariencia, son las gafas de pasta, las camisetas con mensajes, los vaqueros pitillo, las zapatillas Converse clásicas, gorros de punto, sombreros, accesorios retro, chalecos, foulards… Y si todo esto es de segunda mano, mejor que mejor.

Hombrera.



Las hombreras son unas pequeñas almohadillas que algunas prendas llevan en la zona de los hombros para realzar la espalda. Por lo general, se suelen reservar para chaquetas de cualquier tipo y algunos abrigos. Afortunadamente, en el caso del hombre suelen ser bastante discretitas. Qué lejos quedan ya los 90 para algunas cosas.


Hongo Sombrero.




El sombrero hongo, otro término para definir al famosísimo bombín. Es semiesférico, generalmente de fieltro, y con el ala estrecha. Nadie concibe a Charles Chaplin o al Dr. John H. Watson, compañero inseparable de Sherlock Holmes, sin llevar un sombrero de este tipo sobre su cabeza.

Husky.

El husky es un chaquetón, originalmente de caza, de corte recto y confeccionado con un tejido de nylon acolchado impermeable. Normalmente suelen llevar un cuello de pana, aunque también los hay con otros acabados. Los más famosos son los comercializados por la firma Barbour, aunque hay muchas otras que también los tienen en el mercado.



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